LA CAJA DE BOMBANES
Me llamo Marcelino , era mi cumpleaños y me regalaron una caja de bombones , pero cuando me comí uno no sabia donde estaba. Me había trasladado a una isla estupenda, me parecía un regalo de cumple guay, por suerte me había echado bombones al bolsillo. Cuando me canse de nadar y disfrutar alli me tome otro bombón y regrese, contaba en casa todo lo que paso, maravilloso. Pero guarde los demás bombones para casos especiales, viajaba sin motor y gratis , a donde quisiera cada fin de semana. Con felicidad y ligero de equipaje acabo la historia más dulce que recuerdo.